Los efectivos policiales lanzaron chorros de agua desde vehículos conocidos como ballenas y gas lacrimógeno frente a una de las entradas de la pública Universidad Central de Venezuela, en los límites del conurbado municipio Baruta, con el de Libertador.
Los manifestantes comenzaron a lanzar piedras contra los uniformados, quienes respondieron el ataque lanzando más gas lacrimógeno, en una acción en la que resultaron afectados decenas de estudiantes, según los organizadores de la protesta.
La marcha fue convocada por varias federaciones estudiantiles del país, para llegar también a la Fiscalía General de la República, frente a la cual, el 12 de febrero pasado una manifestación estudiantil fue disuelta a balazos por supuestos grupos oficialistas.
El presidente del Centro de Estudiantes de la Universidad Católica Santa Rosa, Eusebio Costa, indicó poco antes que la movilización trató de llegar a la Plaza Venezuela a través de la universidad, donde esperaban dialogar con directivos de seguridad pública.
Costa afirmó en su momento que vamos a llegar a la Defensoría de manera no violenta. Vamos a dialogar en Plaza Venezuela para que nos dejen avanzar y luego nos retiraremos.
Casi en forma simultánea, por otra vía, estudiantes oficialistas iniciaron una marcha para concentrarse en una plaza frente a la Defensoría del Pueblo, donde por la tarde el presidente Nicolás Maduro sostendrá con ellos una asamblea por la paz.