El debate del dictamen avalado con 362 votos, 57 en contra y cuatro abstenciones, motivó que la izquierda en San Lázaro se dividiera una vez más, mientras legisladores del PRI, PAN, PVEM y Nueva Alianza se dedicaron a escuchar los reclamos del llamado polo progresista, identificado con Morena y Andrés Manuel López Obrador.