Según el periódico, la presidenta consideró oportuno y necesario pasar a saludar al papa en ocasión del primer aniversario de su pontificado, luego de reunirse con su homólogo francés Francois Hollande, en el marco del Salón Internacional del Libro de París.
Clarín indicó que el embajador argentino en El Vaticano, Juan Pablo Cafiero, transmitió el mensaje a las autoridades de la Santa Sede, las que sin demora anunciaron que el Papa Francisco recibirá a la presidenta el lunes 17 en audiencia privada.
Podrá decirse que el encuentro es resultado de una movida rápida y audaz de la presidenta, en tanto que fue ella quien tomó la iniciativa, indicó el matutino.
Señaló que con ello, el papa refuerza lo que viene haciendo desde que la presidenta debió ser operada de un hematoma en el cráneo en octubre pasado y a esa dolencia física le sumó la derrota electoral ( ) que le clausuró cualquier proyecto de permanencia en el poder.
Desde entonces, el papa fortaleció su vínculo con la presidenta, la acompañó con varias charlas telefónicas durante su proceso de restablecimiento físico y le ofreció su figura protectora y contenedora en momentos de dura contrariedad política, indicó.
Añadió que el papa ha pedido a gobernadores, empresarios, sindicalistas, legisladores e intendentes acompañamiento responsable, para que el proceso político pueda desembocar sin alteraciones en el recambio presidencial de diciembre de 2015.
Es allí donde el papa parece tener enfocados sus temores inmediatos sobre las cuestiones institucionales del país, señaló.
Afirmó que en la audiencia, la presidenta también escuchará, y coincidirá, en las recomendaciones que seguramente hará el papa sobre los beneficios del diálogo.
Otros temas de interés central para Francisco, como la amenaza del narcotráfico y la situación de los que menos tienen, estarán también en la agenda del 17, afirmó Clarín.