“Esas son las típicas reacciones a las que nos tiene acostumbrado el gobierno venezolano, reacciones paranoicas y esquizofrénicas contra Estados Unidos”, aseguró a Notimex el catedrático de la privada Universidad Metropolitana (Unimet).
Emilio Nouel indicó que esta denuncia busca “culpar a Estados Unidos por los problemas que tiene Venezuela que fueron causados por los malos manejos del gobierno”, como inflación, escasez y criminalidad, que han causado protestas opositoras en las últimas semanas.
Dichas protestas han dejado saldo de 30 muertos, mil 500 detenidos y más de 360 heridos, según cifras del gobierno, que culpa de ello a un plan “golpista” opositor que sería apoyado desde Washington, que además contemplaría la idea del magnicidio.
El analista recordó que en días pasados Nicolás Maduro advirtió a Barack Obama que sería el peor error de su vida firmar la autorización de su asesinato, porque llenaría de violencia a Venezuela, y dijo que la orden estaba en el despacho de su par estadunidense para ser autorizada.
Nouel destacó que previamente Maduro anunció el nombramiento de un embajador en Washington con el fin de mejorar la relación bilateral, por lo que consideró “absurdo y contradictorio” el accionar del mandatario venezolano.
El magister en Integración Económica, subrayó que la verdadera razón detrás de las declaraciones de Maduro podrían ser las críticas de Estados Unidos a la represión gubernamental y las propuestas de aplicar sanciones a altos funcionarios venezolanos.
“Por lo general el gobierno estadunidense no da mucha importancia a las denuncias venezolanas, pero (el vicepresidente) Joe Biden y (el secretario de Estado) John Kerry sí le dieron mucha importancia al tema de los derechos humanos”, aseguró el internacionalista .
Por ello, explicó Nouel, recientemente ambos funcionarios declararon ante el Senado estadounidense que están abiertos a la posibilidad de imponer sanciones contra el gobierno venezolano, algo que causó el malestar de Nicolás Maduro.
Nouel reiteró que la ausencia de pruebas o evidencias sobre el plan magnicida, le hace creer que la denuncia más bien se trata de “una estrategia de buscar un enemigo externo para distraer a la opinión pública sobre los problemas del país”.