El gobierno de Israel anunció el hallazgo de un sarcófago de 1,800 años que trabajadores encontraron en un área de construcción y que inicialmente intentaron ocultar.
El féretro de caliza con un peso de dos toneladas muestra sobre la tapa una escultura de tamaño real de una figura humana con una toga y diseños en las partes laterales, incluida una cabeza de Medusa.
La arqueóloga Gaby Mazor dijo que la pieza data del siglo III y probablemente fue encargada por una familia romana adinerada.
La vocera de la Autoridad de Antigüedades, Yoli Shwartz, dijo que estaba dañado cuando los trabajadores lo desterraron en el sitio de construcción. Los contratistas entonces escondieron la pieza por temor a que les pidieran detener la obra. Agregó que se tomarían medidas legales.