El vicepresidente Nicolás Maduro quien llegó a La Habana el 29 de diciembre en un viaje repentino e inesperado declaró que habló con Hugo Chávez durante sus visitas. “En el transcurso de estos días yo pude verlo en dos oportunidades, conversar con él”, dijo Maduro, quien hizo los comentarios en una entrevista transmitida el martes por la noche por la red de televisión Telesur, con sede en Caracas.
El mandatario “está consciente absolutamente de lo complejo del estado postoperatorio y él nos pidió expresamente, nos ratificó que mantuviéramos al pueblo informado siempre, siempre con la verdad, por dura que ella fuera en determinadas circunstancias”, acotó.
Maduro indicó que “el comandante Chávez ha enfrentado una situación compleja de salud (y) la ha enfrentado, como te podría decir, con la fuerza de siempre”, pese a que a tres semanas de la cirugía a la que fue sometido en Cuba tras el recrudecimiento de células cancerígenas, ha sufrido complicaciones, describiendo al “postoperatorio” como “complejo, delicado”.
“Estamos frente a una situación en donde el presidente está siendo atendido, tiene sus tratamientos, una situación compleja. Todo el tiempo hemos estado esperando su evolución positiva, a veces ha tenida ligeras mejorías, a veces situaciones estacionarias y bueno… nosotros le decimos a nuestros hermanos del mundo, que tengan confianza y seguridad en las informaciones que en cada momento estaremos dando”, indicó.
Chávez no ha sido visto ni oído desde el 11 de diciembre desde cuando fue operado. Desde entonces las autoridades han informado de una serie de altibajos en su recuperación la más reciente, la noche del domingo, anunciando que una infección respiratoria había puesto el presidente en un estado de salud “delicado”.
Jorge Arreaza, yerno de Chávez y actual ministro de Ciencia y Tecnología, escribió en su cuenta de la red social de twitter, que el gobernante pasó el lunes, un día “tranquilo y estable”. “Compatriotas,NO crean en rumores mal intencionados. El Presidente Chávez ha pasado el día tranquilo y estable, acompañado por sus hijas”, escribió Arreaza.
Su tuit se produjo un día después de la declaración sombría de Maduro, quien desde La Habana anunció que Chávez había sufrido nuevas complicaciones debido a una infección respiratoria. Maduro había dicho la semana pasada, antes de ver a Chávez, que el presidente había estado de pie y caminando.
Los adversarios políticos de Chávez se han quejado de que el gobierno no le ha dicho al país lo suficiente acerca de su salud, en sus escuetos reportes oficiales, e incluso algunos de sus partidarios dijeron el martes que quería saber más.
“Alguien me pregunta ayer (lunes) por un mensajito de texto: ¿Cómo viste al presidente? y yo dije ‘con una fuerza gigantesca’, primero uno de los saludos, lo salude con la mano izquierda… y luego me apretó con una fuerza gigantesca mientras hablábamos”, relató el vicepresidente.
“Si nuestro comandante está dando esta batalla con esa fuerza que tiene, nosotros debemos estar con la misma fuerza. Vacunarnos de rumores de mentiras… borrar la mentira, borrar los rumores”, enfatizó. Nicolás Maduro dice que va a regresar el miércoles a Venezuela “para continuar las actividades de trabajo”.
Chávez ha estado luchando contra un tipo de cáncer pélvico no revelado desde junio de 2011. Se ha negado a revelar la localización precisa de los tumores que han sido extraídos quirúrgicamente. El presidente anunció el 8 de diciembre que su cáncer había regresado a pesar de cirugías previas, la quimioterapia y la radioterapia.
El gobierno venezolano no ha dado otros detalles sobre las últimas complicaciones de Chávez más allá de decir que surgió de una infección respiratoria. Adversarios y simpatizantes del gobernante parecen coincidir en la necesidad de que las autoridades ofrezcan más detalles del estado de salud del gobernante.
“Estamos angustiados por la salud del Comandante”, dijo Francisca Fuentes, una obrera jubilada de 63 años que caminaba por una plaza en el centro con sus nietos. “Creo que no se nos está diciendo toda la verdad. Es hora que hablen claro, esto es como que tu tengas un familiar enfermo y el medico te miente a cada rato”.
“Sobre su salud no tenemos más remedio que esperar que el gobierno se digne en decir cómo de verdad está”, dijo Daniel Jiménez, un partidario de la oposición que se encontraba en la plaza de un próspero barrio del este de Caracas.
Jiménez y muchos otros venezolanos dicen que parece cada vez más improbable que Hugo Chávez pueda presentarse en la fecha prevista para asumir un nuevo mandato, el 10 de enero. Chávez ha estado en el cargo desde 1999 y fue reelegido en octubre para otros seis años más, tres meses después de haber anunciado que sus últimas pruebas mostraban que estaba libre de cáncer.
La constitución establece que en caso de que el mandatario electo no pueda juramentarse el presidente de la Asamblea Nacional debe asumir el gobierno y llamar a elecciones en 30 días.
Antes de su operación, Chávez reconoció que enfrentaba riesgos en la operación y designó a Maduro como su posible sucesor, exhortando a sus partidarios a que votasen por el vicepresidente en el caso de que una nueva elección presidencial fuese necesaria.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, envió sus saludos a Chávez en el discurso de Año Nuevo. “Lamento mucho que nuestro hermano latinoamericano Hugo Chávez, nuestro compañero de lucha, compañero anti imperialista, un revolucionario enfrente una situación tan difícil en tema de salud”, dijo Morales.
“Desde acá desear mucha fuerza, dar mucha energía para que pronto pueda recuperarse”, agregó. Morales hizo una breve parada en La Habana la semana pasada para visitar a Chávez, pero no se refirió a ese viaje.