En la 52 Reunión Ordinaria del organismo, en Jojutla, Morelos, expresó que “ninguno de nosotros (los gobernadores) considera chivo expiatorio a ningún exgobernador detenido y bajo procesos penales”, luego de la captura de los exmandatarios de Veracruz, Javier Duarte, y de Tamaulipas, Tomás Yarrington.
Aseveró que llama la atención que quien descalifica las instituciones, “hable de venganzas políticas y no de actos en contra de la corrupción”, en alusión a Andrés Manuel López Obrador, quien ha expresado que las detenciones de exgobernadores son una estrategia política.
Ante todos los gobernadores del país y el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Graco Ramírez consideró indispensable seguir trabajando por la consolidación de la democracia y cuidar responsablemente el próximo proceso en las entidades federativas.
En este sentido dijo que las próximas elecciones que se celebrarán en varios estados “son muy importantes para seguir construyendo la democracia en nuestro país”, por lo que llamó a seguir trabajando y construyendo en la pluralidad, en la tolerancia, en el reconocimiento de nuestras propias diferencias”