Esa fue la peor respuesta que pudo dar el gobierno a la protesta pacífica, precisó el legislador y secretario general del liberal partido Primero Justicia (PJ) en diálogo con Notimex. Guanipa dijo que muchas amas de casa denunciaron que luego de haber hecho largas colas se les negó la venta de harina precocida bajo el argumento de que ocho días atrás ya habían adquirido el producto en otro establecimiento, según información del sistema electrónico.
Una familia integrada por cuatro o cinco personas es imposible que pueda comer durante ocho días con tres kilos de harina precocida, máxime cuando la arepa es el pan venezolano que acompaña a casi todas las comidas, sentenció Guanipa.
Calificó la medida de inconstitucional, ya que limita la posibilidad de que los venezolanos puedan adquirir los alimentos que requieren para su subsistencia, sin tomar en consideración el número de integrantes del grupo familiar.
Esta herramienta, propia de los regímenes comunistas, fue decorada en su nombre para hacerle creer a los venezolanos que era una cosa distinta a la utilizada en la Cuba de los hermanos Castro, pero ya todos sabemos que es la misma cosa, recalcó el legislador.
Agregó que esta tarjeta del fracaso es consecuencia de la política equivocada y nefasta del gobierno de Nicolás Maduro en materia económica, quien -aseveró- se empeña en aplicar un modelo socialista que terminó por destruir el aparato productivo nacional y hoy todo se importa.
Afirmó que las empresas expropiadas por el gobierno están inoperantes y abandonadas, como las productoras de harina de maíz. El gobierno asumió el 48 por ciento de la producción nacional de este rubro y hasta ahora no ha producido un solo paquete de un kilogramo, dijo.
Guanipa agregó que la tarjeta de racionamiento es la peor respuesta que puede dar el gobierno a la protesta pacífica vista en las calles en los últimos dos meses, con un saldo de 41 muertos y centenares de heridos. Es la forma de irrespeto más clara al pueblo que está alzando su voz para que se dé el cambio, recalcó.