México, 30 Nov (Notimex).- En octubre pasado, el saldo de la cartera de crédito vigente de la banca comercial al sector privado en el país aumentó 10.6 por ciento anual, informó el Banco de México (Banxico).
Al dar a conocer los resultados de sus Agregados Monetarios y Actividad Financiera en el décimo mes de 2015, precisa que el crédito al consumo registró un avance de 6.5 por ciento y el saldo del crédito a la vivienda creció 10.5 por ciento respecto a octubre de 2014.
Indica que el crédito a empresas no financieras y personas físicas con actividad empresarial creció 13.5 por ciento, mientras que el saldo del crédito otorgado a intermediarios financieros no bancarios tuvo una variación de 1.2 por ciento.
El instituto central detalla que el financiamiento otorgado por la banca de desarrollo en octubre pasado avanzó 12.0 por ciento y a su interior, el canalizado al sector privado aumentó 15.8 por ciento.
Señala que el financiamiento a estados y municipios, que representa 19.3 por ciento del total, tuvo un incremento de 1.3 por ciento, mientras que la tenencia de valores y el saldo del crédito directo total (vigente y vencido) al sector público federal se elevó 9.1 por ciento.
En cuanto al financiamiento otorgado por la banca comercial, que incluye la cartera de crédito vigente y vencida y la cartera de valores, el Banxico refiere que éste aumentó 10.1 por ciento en términos reales anuales en octubre de 2015.
Por componentes de este indicador, expone que el financiamiento al sector privado se incrementó en 9.3 por ciento, el otorgado a estados y municipios aumentó en 4.2 por ciento, el destinado al sector público federal en 15.9 por ciento y el otorgado a otros sectores presentó en 14.6 por ciento.
Respecto a la base monetaria, precisa que ésta creció 17.7 por ciento en términos reales anuales, debido, en parte, al incremento en la demanda de dinero por parte del público asociado al efecto temporal que se presenta por la celebración de elecciones en el país.
Asimismo, añade, por algunos efectos remanentes de la reforma hacendaria y otros cambios en el uso de medios de pago, cuyos impactos en las tasas de crecimiento anual se deberían diluir a lo largo del tiempo.