El máximo tribunal del país no ofreció ninguna razón al ratificar el fallo, por lo que persiste el conflicto entre las leyes estatales y federales sobre la legalidad de la marihuana medicinal.
Las autoridades del condado de Yuma, en el suroeste de Arizona sostenían que la droga está estrictamente regulada por el gobierno federal y que el fármaco podía ser decomisado al continuar siendo ilegal bajo las leyes federales.
El dictamen se desprende de la apelación interpuesta por Valerie Okun, a quien le fueron decomisados varios gramos de marihuana medicinal en 2011 en la carretera Interestatal 8, cerca de Yuma, Arizona.
Okun, quien contaba con una tarjeta que la acredita para el uso de marihuana medicinal válida de California, nunca fue procesada por la portación de la droga, pero los agentes del sheriff le decomisaron su medicamento.
La ratificación del dictamen por la Suprema Corte da luz verde a que se cumpla el fallo de la Suprema Corte de Arizona, confirmado también por la Corte Federal de Apelaciones del Quinto Circuito, que ordena a la Oficina del Sheriff del Condado de Yuma, devolver a Okun la hierba.
El sheriff del condado de Yuma, Leon Wilmot, se había negado hasta ahora a devolver la marihuana al informar que apelara la decisión con la esperanza de que una Corte Federal de Apelaciones revierta el fallo.
Al ratificar la decisión, la Suprema Corte no emitió ninguna decisión en el conflicto entre las leyes estatales y federales en lugares como Arizona, donde el estado garantiza que algunos individuos pueden comprar y poseer marihuana por razones de salud.
Sin embargo, gobierno federal considera un delito la posesión de marihuana.