La reunión se celebra cuatro días después de que Corea del Norte propuso de manera sorpresiva el encuentro bilateral para mantener un amplio debate sobre las relaciones entre las dos Coreas, como una acción conciliadora ante la reciente tensión entre los dos países.
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur informó que la reunión comenzó después de las 10:00 horas (01:00 GMT) y se centraron en temas de interés común, sin ofrecer más detalles, según un reporte de la agencia informativa surcoreana Yonhap.
Kim Kyou-hyun, presidente de la delegación de Corea del Sur, dijo en declaraciones a la prensa antes de las conversaciones que se reuniría con su homólogo de Corea del Norte con “una actitud abierta para explorar la posibilidad de abrir una nueva Península de Corea.”
Kim, quien dirige la secretaría de la Comisión Nacional Consejo de Seguridad, dijo que su prioridad es asegurar que las familias separadas por la Guerra de Corea (1950-53) puedan reunirse a finales de este mes como estaba previsto.
Corea del Sur y Norcorea acordaron la semana pasada organizar las reuniones de las familias separadas en el Monte Kumgang, un pintoresco complejo de la costa este de Corea del Norte, entre el 20 y 25 febrero. Ambas partes escucharon la posición del otro bando de forma sincera”, reveló un funcionario del Ministerio de Unificación que pidió no ser identificado, argumentando la sensibilidad que existe en relación al tema.
La fuente indicó que Corea del Norte repitió sus exigencias típicas, como el cese de las inminentes maniobras militares conjuntas entre Corea del Sur y Estados Unidos, que el Norte considera un ensayo para una guerra nuclear en su contra, aunque Seúl y Washington afirman que son defensivas.
En protesta por estos ejercicios militares, Pyongyang amenazó con cancelar el acuerdo alcanzado con Seúl para celebrar el encuentro de las familias separadas, aunque ambos países han intercambiado listas de quienes participarán en las reuniones.
Millones de coreanos permanecen separados desde que la Guerra de Corea terminó con un alto el fuego, y no con un tratado de paz. Las reuniones familiares son un asunto humanitario delicado, ya que la mayoría de familiares separados tienen más de 70 años de edad.
Las conversaciones de alto nivel se dan además un día antes de que el secretario de Estado estadunidense, John Kerry, realice una visita a Seúl para examinar los asuntos bilaterales, regionales y globales de amplio alcance, incluido el desarme norcoreano. Las relaciones entre las dos Coreas se deterioraron el año pasado después de que el Corea del Norte llevó a cabo una tercera prueba nuclear y amenazó con lanzar ataques nucleares contra Corea del Sur y Estados Unidos.