ANN ARBOR, Michigan, EE.UU. (AP) Un canadiense atrapado en un cruce fronterizo con 51 tortugas pegadas a su cuerpo con cinta se declaró culpable el martes por contrabando o intento de contrabandear más de un millar de los reptiles del sureste de Michigan.
Kai Xu, de 27 años, ordenaba las tortugas en línea y viajaba a Estados Unidos para recogerlas y luego enviarlas por barco a China o regresar con ellas a Ontario, Canadá. Se declaró culpable de seis delitos en un tribunal federal en Ann Arbor y enfrenta una pena máxima de 10 años en prisión.
Es ilegal exportar vida silvestre de Estados Unidos sin un permiso del gobierno.
Xu “negocia habitualmente envíos de tortugas con valor de 30.000, 80.000 y 125.000 dólares”, dijo la fiscal federal adjunta Sara Woodward en un documento judicial. “En China, las tortugas que contrabandea están valuadas en dos o tres veces la cantidad que él paga aquí”.
El abogado defensor, Matt Borgula, se negó a comentar luego de la declaratoria de culpabilidad.
Xu ha estado en custodia desde su arresto en un suburbio de Detroit en septiembre de 2014. Él se describe a sí mismo como un estudiante de ingeniería en la Universidad de Waterloo, en Ontario, aunque la universidad dijo que no estaba inscrito al momento de su arresto.
En el verano de 2014, semanas antes de su arresto, Xu estaba bajo vigilancia en Detroit. Luego de recoger una caja en una sede de UPS, se ocultó detrás de las camionetas y emergió con “bultos irregulares” bajo sus pantalones, afirmó el agente del Servicio Federal de Vida Silvestre, Ken Adams.
Xu regresó a Ontario pero fue detenido por las autoridades fronterizas canadienses que le encontraron 51 tortugas vivas pegadas con cinta a sus piernas.
A pesar de la detención, “no cesó de contrabandear con tortugas. Ni siquiera alentó el ritmo”, agregó Woodward.