Hasta el momento no he recibido ninguna carta de paralización (de parte de GUPC); nosotros sí le mandamos una carta ayer para que nos indicaran qué estaba pasando, señaló el administrador de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), Jorge Quijano, a la prensa.
Indicó que la falta de esa comunicación formal por parte del GUPC ha influido para que medios europeos informen que no hay ningún paro, (pero) otra cosa es lo que se ve aquí.
He estado en el terreno y los ingenieros están allá y me dicen que aquí no hay trabajo; han mandado a los trabajadores para su casa, mencionó Quijano, quien reiteró que se sigue cerrando la ventana para llegar a acuerdos.
Dije que estaba a minutos de cerrarse ayer, declaró sin mayores explicaciones.
La Autoridad del Canal de Panamá anunció que el miércoles pasado el GUPC, formado por la española Sacyr, la italiana Impregilo, la belga Jan De Nul y la panameña CUSA, suspendió la construcción del tercer juego de esclusas, el principal componente de la ampliación.
El grupo cumplió su amenaza de paralizar las obras luego de tres aplazamientos, el primero vencido el 20 de enero- al fracasar las negociaciones para lograr que la ACP le reconozca mil 600 millones de dólares en supuestos sobrecostos.
La ACP informó que desde el miércoles inició un proceso de análisis para determinar las acciones a seguir, aunque advirtió que la ampliación estará lista en 2014 con o sin GUPC.
El contrato con GUPC es por tres mil 221 millones de dólares, de los cuales ha recibido unos dos mil 800 millones, parte de ellos en adelantos.
El consorcio tiene una fianza de unos 600 millones de dólares, que serían usados en caso de alguna rescisión del contrato.
La ampliación inició en 2007 con una inversión de cinco mil 250 millones de dólares con miras a finalizar el 21 de octubre de 2014, aunque ahora el retraso es de unos nueve meses.