El Congreso de Nuevo León aprobó la reforma a la Ley Estatal de Salud, con 35 votos, seis en contra y una abstención, ahora los médicos de esa entidad podrían negarse a atender a personas de la comunidad LGBT.
Además, se podrán remitir a atender a las personas indígenas, migrantes, mujeres que quieran abortar y personas con VIH.
La reforma cambió la fracción IV del artículo 48 de la ley, establece la “objeción de conciencia”. Esta iniciativa fue promovida por el diputado con licencia Juan Carlos Leal Segovia, del Partido Encuentro Social (PES).
“El personal médico y de enfermería que forme parte del sistema estatal de salud podrá ejercer la objeción de conciencia y excusarse de participar en la presentación de servicios que establece esta ley” así lo dieron a conocer ante el Congreso.