Ortiz Henao fue capturado en 2010 en el marco de una operación contra una banda autonombrada “Los Desmovilizados del Limonar“, integrada en su mayoría por reinsertados de las autodefensas.
El grupo delinquió durante una década en varios barrios de Medellín, dedicándose al sicariato, al desplazamiento forzado, la extorsión, el tráfico de armas y estupefacientes y la usura, según informó el diario “El Colombiano”.
En agosto de 2012, Ortiz fue recibido con ovaciones y una iglesia colmada de sus seguidores cuando fue liberado de la prisión por un juez tras pasar más de dos años de encierro en una finca de la Curia, debido a las pruebas en su contra que lo evidenciaban como líder de esta banda de sicarios.
Su condena fue anunciada el jueves, cuando el Tribunal Superior de Medellín revocó la medida absolutaria de un juzgado penal de la ciudad y validó la apelación de la Fiscalía, que había acusado al religioso por concierto para delinquir agravado.
A juicio de la Fiscalía, el entonces párroco de la iglesia San José de El Limonar era el cabecilla político de “Los Desmovilizados”.