Después de que el exgobernador Bob McDonnell fue sentenciado el martes a dos años de cárcel por corrupción, se disculpó por sus errores pero dijo que no violó su juramento al cargo al frente de Virginia y que continuará luchando para demostrar su inocencia.
McDonnell dijo lo anterior afuera del palacio de justicia federal en Richmond. Durante la audiencia de sentencia horas antes el martes, el político reconoció ante el juez que era un hombre acongojado y humillado que permitió que su vida perdiera el equilibrio.
El castigo ordenado por el juez fue muy inferior a los 10 años de prisión solicitados inicialmente por los fiscales, pero aun así mayor al castigo de servicio comunitario solicitado por el ex gobernador y cientos de sus partidarios.
McDonnell deberá presentarse en la prisión el 9 de febrero. Su esposa, quien fue declarada culpable de ocho cargos de corrupción, será sentenciada el 20 de febrero.