Mérida, 4 Oct (Notimex).- La música y los títeres se unieron esta noche en el escenario del teatro José Peón Contreras de esta capital para recordar a uno de los prodigios de la cultura contemporánea de Yucatán, Wilberth Herrera Pérez, a cuatro años de su fallecimiento.
Herrera Pérez dedicó su vida al teatro de títeres y marionetas e hizo infinidad de obras que presentó por muchos años en el Teatro Pedrito, foro que él fundó a principios de la década de los 70 y de donde nació el proyecto Titeradas de donde salieron personajes que hasta hoy son recordados y disfrutados por chicos y grandes.
El homenaje al artista nacido el 22 de mayo de 1943 en el puerto de Progreso fue encabezado por sus hijos Andrea, Pedro y Juan, quienes llegaron a trabajar con él en muchas temporadas que se presentaron en el Teatro Pedrito.
Hoy Pedro Carlos Herrera es el director de la Orquesta Típica Yucalpetén y junto con su hermano Juan en la batería y Andrea, manipulando títeres y marionetas, unieron sus talentos para hacer del Teatro José Peón Contreras un lugar lleno de alegría y emoción, como don Wilberth concebía su mundo de títeres.
Los hermanos Herrera también contaron con el apoyo de reconocidos artistas locales como Angélica Balado, Mari Carmen Pérez, Jesús Armando, el ballet folclórico Flor del Campo, entre otros, para coronar lo que sin duda fue una noche emotiva para el público que abarrotó el Peón Contreras.
El programa musical que ofreció la Tipica de la mano de Pedro abarcó prácticamente todo lo que da identidad cultural a Yucatán, pues sonó la jarana, la trova, el bambuco, la cumbia, la charanga mezclados con algunos sones, mambos y cha cha chás.
Mientras las canciones sonaban, Andrea y su equipo de tiriteros hacían lo suyo, y presentaban todas las técnicas de fondos negros que don Wilbert dejó como uno de sus principales legados, que se complementaron con marionetas y títeres cuya creación y manipulación son consideradas innovaciones.
Entre los más destacados, están los humanetes que como su nombre lo indica, soy marionetas que se hacen con forma de humanos, y destacó una hecha con forma de anciana vestida con el huipil que es el traje típico de esta entidad y que fue presentada durante la canción Piel de Barro de la autoría de Angélica Balado.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando Pedro presentó la canción Mestiza de Oxkutzcab cuya letra escribió junto con su padre y que dio origen e una de las marionetas más populares e icónicas la cual fue bautizada por Herrera Pérez como Lela Oxkuztcaba.
Tras la canción apareció entonces Lela de la mano de Chereque, un gato azul que siempre ha estado perdidamente enamorada de la mestiza y que constituyen una de las parejas más representativas del espectáculo local, pues incluso protagonizaron varias temporadas que fueron transmitidas en el sistema estatal de televisión.
Con esos personajes en escena, el público se entregó de lleno y devolvió con risas, carcajadas y prolongados aplausos el regalo que los hijos de don Wilberth prepararon para recordar los cuatro años de su adiós, ahí en el mismo lugar en donde miles de yucatecos lo despidieron en octubre de 2011.
El evento también sirvió para promocionar el plan para rescatar al Teatro Pedrito, ahí donde le homenajeado dio vida a ese mundo de fantasía e ilusión que persiste de la mano de las generaciones que se ven en esos títeres y en las aventuras épicas con ese toque yucateco que Wilberth Herrera creó en su paso por estas tierras del sureste.