Luego del asesinato de una maestra y el suicidio de José Ángel de 11 años, el Colegio Cervantes reanudó clases pero con detectores de metal.
Al llegar al Colegio Cervantes en Torreón, Coahuila, los alumnos se encontraron con un detector de metal en la entrada del Instituto, por el cual debían pasar antes de ingresar al plantel.
Adicional, personal del Colegio revisa el contenido de sus mochilas, y cualquier tipo de bolsa que estos lleven, las cuales deben de ser transparentes, así lo aprobaron los padres de familia.
Otra iniciativa del Colegio es que alumnos, docentes y padres de familia recibirán apoyo emocional de especialistas si estos lo solicitan.