Por Olga Borobio. Corresponsal
Berlín, 2 Nov (Notimex).- El tradicional Día de Muertos se conmemora en la embajada de México en Berlín con un mural y un altar en honor al actor Roberto Gómez Bolaños Chespirito y al escritor, periodista y académico Vicente Leñero.
En el Foro Cultural de la embajada de México en la capital alemana se marcó el camino que lleva al Altar de Muertos trazado con velas, en el que se encuentra una cruz de flores de cempasúchil. La flor de un intenso amarillo adorna también el altar, que tiene tres niveles.
El cempasúchil no es auténtico pero es una copia fiel hecha por manos mexicanas. La parte de abajo del primer nivel está decorada con papel picado de colores, y su superficie está cubierta de tela morada sobre la que se colocaron individuales con pinturas y bordados mexicanos.
Sobre ese nivel hay coloridas calaveras de diversos materiales, así como platones de cerámica mexicana y canastas en donde se colocaron naranjas, pollo con mole, pan de muerto hecho especialmente en Berlín para la ocasión y arroz con chiles.
Garrafas, botellas de tequila, calabazas alemanas naturales que suelen usarse en las celebración de Halloween en el país europeo.
Diseminados, cartones de lotería mexicana visten también el altar, donde hay retratos de seres queridos que ya murieron de quienes realizaron esa obra, así como velas y jarrones con ramos de cempasúchil, canastas llenas de cazuelitas de barro y anafres.
La frontera entre ese nivel y el siguiente la marcan ídolos indígenas de barro, así como calacas mexicanas. Un colorido papel pintado con cráneos y calacas cubre la altura que lleva al siguiente nivel.
El papel, bellamente pintado, representa árboles de la vida, que si uno pone atención, son en realidad calacas que sostienen en las ramas cráneos típicos mexicanos en esta fecha. La altura que lleva al tercer nivel está decorada con papel picado, y sobre él están los retratos de Vicente Leñero y de Chespirito.
Entre ellos se alza un candelabro de artesanía mexicana, así como cráneos y una cruz de cempasúchil. Al lado izquierdo hay un esqueleto sentado y con sombrero, y una catrina de pie del tamaño de una persona, mientras que del otro lado hay dos catrinas de un formato más pequeño.
Al lado derecho se encuentra el Mural pintado en una pared transportable por la artista mexicana Bianca Monroy, quien es también la presidenta de la Sociedad Mexicano-Alemana en Berlín.
Monroy dijo a Notimex que el colorido del mural y del altar expresa su visión del mundo, un mundo en el que hay claros y oscuros, vida y muerte, pero en la que prevalece, y pesa más en la balanza, lo positivo.
El mural representa varios niveles: en el de abajo están las personas que ya han muerto tanto en su círculo familiar y de conocidos como en el mundo. Ese nivel está unido por un trazo serpenteante con la muerte y la vida, con el eclipse que une al sol y a la luna en la parte superior, fenómeno cósmico del que nace una flor, que refleja la belleza de la vida.
La artista mexicana radicada en Berlín desde hace ocho años, quien hace collages con materiales muy diversos, así como pintura, fotografía y diseño gráfico, dijo asimismo que el otro gran objetivo del altar y del mural es proyectar las tradiciones mexicanas en la cultura alemana, donde las tradiciones son tan distintas.
Monroy, de padre mexicano y madre italiana, nació en Veracruz durante el verano de 1978. De formación artística autodidacta, la fascinación por las artes visuales, así como la necesidad de compartir su intensa vida interior la llevaron a experimentar de manera libre con formas, colores, materiales y texturas desarrollando desde sus primeros trabajos una voz fuerte y única.
El altar y el mural permanecerán abiertos al público y a grupos de escolares alemanes en la embajada mexicana en Berlín hasta el viernes 6 de noviembre.
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