Colombia enfrenta graves riesgos y ventajas de devaluación, alertó hoy el sector de la construcción, que aseguró que un dólar por encima de los tres mil pesos tiene efectos nocivos para la demanda de importados y en consecuencia aumentos generalizados en los precios de insumos.
La presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), Sandra Forero, declaró que un dólar que supera los tres mil pesos tiene efectos nocivos para la demanda de importados y en consecuencia aumentos generalizados en los precios de insumos, pero también significa la oportunidad para exportar e impulsar la inversión extranjera.
Se deben tener en cuenta las dos caras de la moneda del actual fenómeno cambiario. Más allá de lo que ocurra de forma indirecta sobre la demanda agregada y las expectativas, se debe centrar la discusión en los efectos directos sobre los costos de construcción, señaló la dirigente gremial.
Pero este fenómeno de depreciación del peso también sirve para incrementar las inversiones en dólares que realizan locales y foráneos en proyectos constructivos.
Sin embargo, dijo Sandra Forero, por el otro lado está la oportunidad de canalizar recursos de inversión en dólares hacia la actividad. Un ejemplo son las remesas que recibe el país desde el extranjero.