Tras décadas que impactaron a millones de matrimonios, China anuló su política de hijo único, ahora permitirá a las parejas casadas tener dos, sin ninguna restricción.
China ha ido reduciendo las restricciones que se introdujeron en 1980 como una forma de frenar el crecimiento poblacional que amenazaba con saturar el uso de recursos vitales, como el agua.
El Partido Comunista anunció además que ha fijado un objetivo de “mantener el crecimiento económico en un ritmo medio superior” para los próximos cinco años a partir de 2016.