La Casa Blanca minimiza protestas contra Estados Unidos en Irán

“La mayoría de los iraníes preferirían una mejor relación con Occidente y sus beneficios, incluidos los que tendría la economía y sumarse a la comunidad internacional, que el (actual) statu quo”, dijo el portavoz presidencial Jay Carney.

Miles de manifestantes se congregaron en las inmediaciones de la sede diplomática estadounidense en la capital iraní, donde quemaron banderas con la efigie del “Tío Sam”.

Carney reconoció que la desconfianza mutua entre Estados Unidos e Irán es “profunda” y no desaparecerá de inmediato.

Sin embargo, señaló que la administración del presidente Barack Obama se encuentra enfrascada en “negociaciones sustantivas y serias” con el nuevo gobierno del presidente Hasán Ruhaní, para evitar que Irán avance en su programa nuclear.

“Nuestra meta es concretar un acuerdo verificable que no permita a Irán contar con una arma nuclear”, dijo Carney.

“Lo buscaremos agresivamente mientras la ventana esté abierta, pero no seguirá así indefinidamente”, acotó.

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