Por Rubén Barrera. Corresponsal
Washington, 24 Ene (Notimex).- La Casa Blanca defendió hoy la afirmación del presidente Donald Trump de que hasta 3.5 millones de inmigrantes indocumentados votaron durante la pasada elección a favor de la candidata demócrata Hillary Clinton.
No obstante, el vocero presidencial, Sean Spicer, evitó presentar evidencias que apoyen el dicho de Trump, declarando que cualquier cosa puede pasar, tras ser cuestionado sobre la necesidad de abrir una investigación ante el impacto de una denuncia de tal magnitud.
El presidente cree eso. Lo ha declarado antes. Creo que él externó sus temores sobre un fraude electoral y gente votando de manera ilegal durante la campaña y él mantiene esa creencia basado en estudios y evidencia que la gente le ha presentado, sostuvo.
El mandatario reiteró sus acusaciones durante un encuentro privado con líderes demócratas y republicanos en el Congreso, celebrado la víspera por la noche en la Casa Blanca, lo que fue calificado por un legislador republicano como una conducta obsesiva.
Eso sacude la confianza sobre nuestra democracia. Él necesita presentar pruebas de por qué cree eso, yo no lo creo. Creo que es lo más inapropiado para el presidente decirlo sin pruebas, aseveró el senador republicano por Carolina del Sur, Lindsay Graham.
El también ex aspirante presidencial a la nominación republicana recordó los casos de Albert Gore y Richard Nixon, quienes aceptaron su derrota en las urnas a pesar del reducido margen de votos que los separaba de los ganadores.
Estamos hablando de un hombre que ganó la elección y parece obsesionado con la idea de que él no pudo haber perdido el voto popular sin que hubiera trampas o fraude, apuntó el legislador en entrevista con la televisora CNN.
Trump ganó la Presidencia con 304 votos electorales, más que ningún otro candidato presidencial republicano desde Ronald Reagan, pero perdió el voto popular ante Clinton por casi tres millones de sufragios.
Spicer desestimó la noción de que la acusación de Trump sea evidencia de que, pese a todo, no está satisfecho con su triunfo, y recordó que esta no es la primera vez que el magnate ha externado esta creencia.
Creo que hay estudios que hablan de que 14 por ciento de la gente que ha votado no eran ciudadanos. Hay otros estudios que le fueron presentados. Es una creencia que él mantiene, insistió.
A diferencia de Graham, líderes republicanos en el Congreso como Paul Ryan y Kevin MrCarthy buscaron desmarcarse de las declaraciones de Trump, que dominaron el tenor de la segunda conferencia formal de Spicer.
Ya he comentado sobre eso. No he visto evidencia de eso. Lo he dejado bastante en claro, dijo Ryan al preguntarle al respecto en conferencia de prensa por separado, mientras que McCarthy consideró que se trata de una broma.