“El pueblo panameño puede estar seguro de que la ampliación de nuestro Canal se completará en el menor tiempo y costo posible, dentro de los términos del contrato”, indicó un comunicado emitido por los 10 máximos directivos canaleros.
Además manifestaron “su pleno apoyo a la gestión de su administración en todos los retos que se han presentado durante la ampliación del Canal”. “La situación actual, aunque delicada, es un desafío más que estamos afrontando juntos y que confiamos resolver”, indicó la nota.
El Grupo Unido por el Canal de Panamá (GUPC) amenazó el 30 de diciembre con paralizar sus trabajos a partir del 20 de enero si la ACP desatiende sus reclamos de mil 600 millones de dólares en sobre costos.
Aunque el grupo ?integrado por la española Sacyr Vallehermoso, la italiana Impregilo, la belga Jan De Nul y la panameña CUSA- ha señalado su interés en continuar la obra hasta ahora no han oficializado su intención de levantar la amenaza.
Quijano advirtió que la ACP será definitiva para conocer cuál es el rumbo de la ampliación, aunque dijo que están preparados para asumir los trabajos. “Tenemos suficientes fondos para nosotros casi de inmediato retomar la obra, reiniciarla y en 15 días podríamos llegar al 30 por ciento y de ahí en adelante aumentar la producción”, dijo Quijano al indicar que existe una fianza de cumplimiento de 600 millones de dólares.
Para las próximas horas se prevé que se realice una tercera reunión de acercamiento entre las partes en busca de una solución aunque la ACP demanda que cualquier reclamo siga los mecanismos establecidos en el contrato de 2009 por tres mil 221 millones de dólares.
Para resolver la amenaza, la ACP propuso un adelanto en pago de 100 millones de dólares pero el GUPC demandó 500 millones de dólares e incluso una de las empresas ?Impregilo- propuso que el canal les pague mil millones de dólares, adicionales al contrato.
El GUPC atribuye los sobrecostos a fallas geológicas descubiertas luego de la licitación de 2009 y no reportadas por la ACP lo cual derivo en una demora que ya lleva nueve meses.
La ampliación inició en 2007 con una inversión de cinco mil 250 millones de dólares para finalizar en octubre de 2014 y se estimaba, antes del conflicto, que finalizaría en junio de 2015 pero ahora se menciona incluso 2016.