Un grupo de 35 condados de California acordaron proporcionar servicios básicos de salud a inmigrantes que residen de manera ilegal en Estados Unidos.
La decisión fue tomada el jueves por el panel que dirige el Programa de Servicios Médicos de Condados, que destina recursos para servicios de salud a los pobres en condados mayormente rurales y escasamente poblados. Los condados incluyen Yolo, Sonoma y Marin, en el norte del estado, e Imperial, cerca de la frontera con México.
El programa podría comenzar el año próximo y se espera que varios miles de personas se beneficien.
El supervisor del condado de Yolo, Don Saylor, dijo al diario Los Angeles Times:
“Francamente, es justo lo que hay que hacer” “Tener a tantas personas fuera es inconcebible”.
Abrir el programa de atención de salud de bajo costo para los inmigrantes es importante para prevenir que las enfermedades transmisibles se propaguen y para reducir la práctica costosa de que las personas acudan a las salas de emergencias para atención que en realidad es de rutina, dijo Saylor.
Los inmigrantes que residen en el estado sin papeles integran actualmente el mayor grupo único de personas sin cobertura médica de California. No son elegibles para recibir atención médica bajo la ley federal Affordable Care (Asistencia Asequible) ni mediante el programa público del estado, Covered California.