LA PAZ, Bolivia (AP) — Los indultos y una atención judicial más ágil redujeron en un 8% la cantidad de detenidos sin sentencia, la mayoría de la población carcelaria de Bolivia, desde la visita del papa Francisco a una de las mayores prisiones del país.
“Se ha logrado reducir en algo la población carcelaria detenida preventivamente. Actualmente 13.468 privados de libertad existen a nivel nacional”, informó el martes el director nacional de Régimen Penitenciario, Jorge López.
El mayor problema carcelario de Bolivia es el hacinamiento, ya que sólo 28% de los presos tiene sentencia firme.
“Estamos hablando de que hace unos seis meses atrás eran más del 80% y ha bajado a 72%” la población carcelaria detenida preventivamente, dijo el funcionario.
Según López la población carcelaria más beneficiada fue la femenina ya que hasta el año pasado había un 12% de mujeres en prisión preventiva y “ahora está bajando a un 8%”.
Francisco visitó en julio Palmasola, la cárcel más grande Bolivia ubicada en Santa Cruz, a unos 410 kilómetros al este de La Paz. Allí el papa dio su bendición a los presos y pidió que reciban una mejor atención.
En 2013 en Palmasola más de 30 reos murieron tras un incendio que siguió a una trifulca entre dos bandos por tomar el poder del recinto. El incidente se produjo un año después de la muerte de cuatro presos en la Cárcel del Abra en Cochabamba, a unos 300 kilómetros al este de La Paz.
Durante la administración del presidente Evo Morales, en el poder desde hace nueve años, se han otorgado tres indultos. El último, aplicado en 2014, se extendió hasta la visita del papa en julio y benefició a quienes hubieran cometido delitos menores.
En tanto en los últimos dos meses la justicia boliviana, muy criticada por su lentitud, aplicó un plan de descongestionamiento que permitió el dictado de 809 sentencias, según el Tribunal Superior de Justicia.