Silvio Berlusconi, de 77 años de edad, llegó esta mañana al centro Sagrada Familia de la localidad de Cesano Boscone, donde estuvo unas cuatro horas.
Tanto a su arribo, como a su salida, el ex jefe de gobierno evitó hacer declaraciones a los periodistas y solamente saludó a una de sus seguidoras, una anciana que le dedicó una canción. “Todo ha ido bien”, dijo a los medios el director general del asilo, Paolo Pigni, sin dar mayores detalles.
Berlusconi fue condenado en agosto pasado a cuatro años de cárcel por fraude fiscal, pero debido a su edad y a los beneficios de la ley del indulto, la pena le fue conmutada a poco más de 10 meses de servicio social en el asilo Sagrada Familia, en donde un día a la semana trabaja con ancianos enfermos de Alzheimer.
A diferencia del viernes pasado, este viernes no fue permitido el acceso a los periodistas, pues la dirección del asilo dijo querer salvaguardar la tranquilidad de los pacientes.
Pese a haber sido sentenciado en vía definitiva, los jueces autorizaron al ex Cavaliere viajar a Roma entre martes y miércoles de cada semana para realizar actividad política. El exjefe de gobierno, que no puede participar como candidato, apoya sin embargo la campaña de su partido, Forza Italia, de cara a las elecciones europeas del próximo 25 de mayo.
De acuerdo a sondeos, esa formación política ha caído al tercer lugar de las preferencias electorales, detrás del centro izquierdista Partido Democrático, del primer ministro, Matteo Renzi y del Movimiento 5 Estrellas, del ex cómico Beppe Grillo.
En declaraciones a la emisora Radio 24, Berlusconi aseguró hoy que en caso de que en los comicios europeos su partido obtenga menos del 20 por ciento de los votos, como lo preven los sondeos, no se hará a un lado, sino que buscara reconstruirlo.
En tanto, los medios informaron que uno de los históricos colaboradores del ex premier, su ex ministro de la Defensa y ex abogado, Cesare Previti, ha abandonado Forza Italia y estaría por pasar al movimiento Nueva Centro Derecha, que se escindió en noviembre pasado del partido de Berlusconi.
A esa formación política se han ido algunos de sus principales colaboradores, desde su ex delfín, Angelino Alfano, actual ministro del Interior, hasta su ex portavoz, Paolo Bonaiuti.
Otro de los estrechos colaboradores de Silvio Berlusconi, el ex senador Marcello Dell’Utri está detenido en Líbano, que este viernes anunció que lo extraditará la próxima semana a Italia, donde fue sentenciado en vía definitiva a siete años de cárcel por asociación mafiosa.