Por Julieta Aragón. Enviada
Belmopán, Belice, 2 Nov (Notimex).- A 34 años de haber conseguido su independencia, Belice se ubica dentro de los países con un índice de desarrollo humano elevado, grupo al que también pertenece México, de acuerdo con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En el índice que analiza la esperanza de vida, la educación y el Producto Interno Bruto per cápita traducido en un nivel de vida digno, Noruega ocupa el primer lugar, México el 71 y Belice el 84.
Si bien la nación centroamericana enfrenta grandes retos en materias económica y social, como la construcción de más infraestructura carretera y sanitaria, supo aprovechar su localización geográfica.
Así como su pasado maya y su belleza natural, entre la que se encuentra el segundo arrecife más grande del mundo, le permitió potencializar el turismo, por el cual recibe alrededor de un millón de visitantes al año.
Su economía, sustentada en la tala del árbol de caoba en la época colonial, se diversificó y entre las actividades a las que se dedican los beliceños están la pesca, la agricultura, en particular la producción de caña de azúcar, cítricos y plátano, así como el comercio, los servicios y las oficinas gubernamentales.
Ejemplo de la actividad comercial es la Zona Libre de Corozal, ubicada al norte del país. En ella trabajan más de 3 mil 500 beliceños y genera alrededor de 300 millones de dólares al año.
En este lugar, creado para combatir el desempleo que originó el cierre del Ingenio Libertad a principios de 1990, se comercializan diversos productos que van desde textiles, como ropa y zapatos, licor, cigarros, combustible, juguetes y hasta aparatos electrónicos.
En su mayoría, los productos son importados de Asia, Estados Unidos, Sudamérica, México y Canadá, y debido a que están exentos de impuestos no pueden ser adquiridos por los beliceños, por lo que el mayor número de consumidores son los mexicanos asentados en el sureste de México.
A pesar de la gran actividad comercial de esta zona, la economía beliceña enfrenta el desafío de crear más empleos, por ello el gobierno y algunas empresas implementaron proyectos para ocupar a población vulnerable.
El director ejecutivo de Cisco Construction Limited, Francis Woods, relató que la firma lleva a cabo un programa que genera infraestructura y emplea a personas en la única prisión de Belice.
“Vimos que ahí hay mucha gente simplemente porque no puede dar comida a sus familias y no puede sobrevivir porque no tiene trabajo”, dijo el ejecutivo, quien agregó que para ellos “es muy importante que esa gente de alta marginación tenga la oportunidad de trabajar porque baja mucho el crimen en Belice, y si bajamos el crimen en Belice, va a venir más gente”.
Destacó que esta empresa generó en 2014 alrededor de 700 empleos en diferentes proyectos de infraestructura carretera.
Según datos de la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (Cepal), el desempleo se redujo de 11.7 por ciento en 2013 a 11.1 por ciento en 2014, gracias al crecimiento en la construcción, turismo y otros servicios.
Sin embargo, al igual que otras naciones, Belice redujo su producción petrolera, la cual pasó de dos mil 313 barriles diarios en 2013 a mil 838 barriles diarios en el primer semestre de 2014, de acuerdo con cifras de la Cepal.
Debido a que el país no cuenta con industria, importa muchos de los productos que consume su población, tal es el caso del combustible; la maquinaria y el equipo de transporte; los productos manufacturados; alimentos, bebidas y tabaco así como químicos.
No obstante, en esta nación el visitante no encontrará tiendas de conveniencia o restaurantes de comida rápida, porque no existen las franquicias.
Pese a los retos económicos, algunos de sus habitantes consideraron, en un sondeo, que el país avanzó en los últimos años y les ofrece la posibilidad de vivir con sus necesidades satisfechas siempre y cuando se dediquen a trabajar.
Visitar Belice implica adentrarse a su historia, sin la que no se podría entender el punto de encuentro de las muchas etnias y culturas que convergen en él.
El proceso de independencia de esta nación fue muy distinto al de los países latinoamericanos colonizados por España, pues aunque también formó parte de la corona española, a partir de 1798 estuvo bajo el dominio británico.
La diferencia del movimiento independentista también radicó en que este no consistió en una rebelión armada y pese haber surgido dentro del país, se resolvió en la Organización de Naciones Unidas (ONU) debido al diferendo territorial con Guatemala.
País, que desde 1821 reclama como suyo el territorio beliceño y que ya en el siglo 20, en 1945, declarara que Belice es parte integrante del territorio nacional guatemalteco.
El director Ejecutivo del Corporativo RSV, René Villanueva, expuso que la independencia de Belice fue un proceso muy largo que comenzó la víspera del Año Nuevo de 1950, cuando el gobierno colonial devaluó 40 centavos el dólar beliceño, que se encontraba a la par del americano.
La devaluación afectó el comercio y en general la vida del país, por eso George Price, John Smith y Nicholas Pollard, entre otros, se reunieron y acordaron salir a las calles al día siguiente a manifestarse con el grito “regrésenos nuestro dólar”, narró Villanueva, quien también formó parte del movimiento de independencia.
En 1964, la entonces Honduras Británica como se conocía a Belice, consiguió el derecho de autogobernarse convirtiéndose George Price en el Premier.
El movimiento de independencia siguió cobrando fuerza gracias a que Price recorrió el país y fue sumando a la causa a las distintas identidades culturales, al tiempo que estas se fueron amalgamando en una beliceña.
Para 1975 el gobierno que encabezó Price, considerado hoy el Padre de la Patria, internacionalizó el movimiento de Independencia al llevarlo a la ONU.
“Las Naciones Unidas hacían una moción apoyando la independencia temprana de Belice, pero Belice no pudo tomar su independencia porque Estados Unidos no votaba, en primer lugar. Y los países centroamericanos y los latinoamericanos, claro que estaban a favor de Guatemala que estaba muy opuesto, por supuesto a la independencia beliceña”, señaló en entrevista Villanueva.
Fue hasta 1980 cuando la moción prosperó en Naciones Unidas. El representante en ese tiempo de Belice ante el organismo mundial, Bobbie Leslie dijo en una entrevista concedida a René Villanueva, que ese año la moción alcanzó 154 votos a favor, uno en contra, que fue el voto de Guatemala.
Además “hubieron abstenciones ñ…] de algunos países como Marruecos, Argentina e Indonesia”, recordó.
Así, el 21 de septiembre de 1981 Belice consiguió su independencia. La fecha de este importante día se debe a razones religiosas, como lo señaló Price en una entrevista hecha por Villanueva.
En ella, dijo: “elegí el día 21 porque si lo divides entre siete y lo multiplicas por tres hace un número mágico para mí. Tres por la Santísima Trinidad y siete, por los sacramentos, por eso es el 21.”
Como muchos beliceños, René Villanueva recordó como un momento muy especial y emotivo la ceremonia del cambio de poderes efectuada la noche del 20 de septiembre de 1981, a la que asistieron los representantes de la reina Isabel II.
“La bandera británica estaba en el asta de la casa de gobierno, poco antes de la medianoche tocaron el himno británico ñy a bajar] la bandera británica. Luego se escuchó el himno nacional de Belice ñmientras fueron subiendo] la bandera beliceña. Al terminar, está en lo alto. Entonces Belice es libre, soberano e independiente”.
No obstante, la independencia es un tema que aún genera opiniones encontradas entre los beliceños, en parte por el diferendo territorial con Guatemala que sigue sin resolverse.
Hay quien piensa que la vida colonial era mejor, que se sentían más protegidos bajo el gobierno del Reino Unido, pese a que tampoco ha habido un conflicto armado en los años de libertad.
Por la amenaza que le significa Guatemala, Belice es uno de los 53 estados soberanos que conforman la Mancomunidad Británica de Naciones, los cuales reconocen como jefe titular de Estado a la reina Isabel II de Inglaterra.
Por ello, el dólar beliceño lleva el signo de la reina y tiene el mismo sistema de gobierno que el de Canadá o el de la misma Inglaterra, señala Villanueva, quien explica que este es parlamentario.
En el dos partidos políticos van a las elecciones. El líder del partido que gana la mayoría se convierte en primer ministro, el vicelíder es el viceprimer ministro. El país cuenta con una Cámara de representantes y el poder Judicial que reside en la Suprema Corte.
El territorio beliceño se divide en seis distritos y sus principales ciudades son: Belice, la ciudad más poblada así como Belmopán, capital económica y política del país desde 1970, tras la destrucción que causó el huracán Hattie en la ciudad de Belice.