En un mensaje a la nación desde la Oficina Oval de la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, hizo un nuevo llamado al Congreso para endurecer el acceso a armas de fuego, incluidos rifles de asalto, en respuesta a las amenazas del Estado Islámico tras los ataques en San Bernardino y París.
Obama defendió su estrategia de ataques aéreos y fuerzas especiales contra los yihadistas, y descartó la posibilidad del envío de tropas a Irak o Siria.
La amenaza del terrorismo es real, pero la superaremos y vamos a destruir al Estados Islámico y a cualquier organización que quiera destruirnos, señaló Obama, quien se refirió a los yihadistas como matones y asesinatos.