Los galardonados, incluidos un judío y un afroestadounidense, habían recibido la Cruz de Servicio Distinguido, pero serán elevados a la Medalla de Honor, que sólo se otorga a miembros de las fuerzas armadas que se distinguen en acciones militares contra el enemigo.
Tres de los premiados se encuentran con vida, por lo que se espera que reciban la medalla personalmente, mientras que los galaerdones restantes serán otorgados de manera póstuma a sus familiares, señaló un funcionario de la Casa Blanca.
Entre los galardonados figura el mexicano Jesús Durán, nacido en Ciudad Juárez, Chihuahua, quien recibe la presea póstumamente por su valor como operador de ametralladora en una misión militar contra fuerzas vietnamitas, el 10 de abril de 1969.
Asimismo, recibirá su medalla en forma póstuma el soldado mexicano Pedro Cano, nacido en La Morita, en Tijuana, Baja California, por su valentía durante una misión en la Segunda Guerra Mundial contra el enemigo en Schevenhutte, Alemania, el 3 de diciembre de 1944.
Los tres veteranos sobrevivientes son el especialista Santiago Erevia, quien sirvió en el ejército en la guerra de Vietnam como operador de radio, y quien recibe la presea por sus acciones en un operativo cerca de la ciudad vietnamita de Tam Ky.
También recibirá la presea en persona el sargento José Rodela, miembro de las fuerzas especiales durante la guerra de Vietnam, y el sargento Melvin Morris, un comandante aéreo durante el mismo conflicto armado.
De forma póstuma, el presidente estadounidense otorgará la medalla al sargento Candelario García, el especialista Leonard Alvarado, el sargento Félix Conde-Falcón y el especialista Ardie Copas, todos veteranos de la guerra de Vietnam.
Mientras que los veteranos de la guerra de Corea que serán premiados son los caporales Joe Baldonado y Víctor H. Espinoza, los sargentos Eduardo Gómez, Juan Negrón, Mike Peña y Jack Weinstein, así como los soldados Leonard Kravitz, Demesio Rivera y Mike Vera.
Por sus actos de valor en la Segunda Guerra Mundial, la Medalla de Honor será otorgada a los soldados Pedro Cano, Joe Gándara, Salvador Lara, a los sargentos William Leonard, Manuel Mendoza, Alfred Nietzel y al primer teniente Donald Schwab.
En 2002, el Congreso estadounidense pidió una revisión de los veteranos de guerra judíos e hispano para asegurarse que no se les había negado la presea debido a prejuicios por su origen étnico.
Durante la revisión, los investigadores encontraron registros de soldados que también merecían la presea sin ser judíos o hispanos, por lo que el estatuto fue ampliado para incluir a veteranos de otros orígenes raciales o étnicos.