Las medidas significarán la respuesta más amplia del gobierno frente al malestar provocado dentro y fuera de Estados Unidos después de las revelaciones hechas el año pasado por el excontratista de la NSA, Edward Snowden.
Sin adelantar los alcances de los anuncios que Obama hará durante su discurso en el Departamento de Justicia, el vocero presidencial Jay Carney dijo que ante todo el mandatario reafirmará su “absoluto compromiso para mantener la seguridad de los estadounidenses”.
Recordó que desde que el panel de expertos entregó su reporte el 18 de diciembre pasado, Obama llevó a cabo un intenso proceso de consultas con diferentes actores para examinar a fondo esas recomendaciones.
“Mañana ustedes verán el producto de ese esfuerzo”, dijo el vocero durante su habitual rueda de prensa.
En su reporte, el denominado Grupo de Revisión de Inteligencia y Tecnología de Comunicaciones recomendó, entre otras acciones, que la NSA modifique sus prácticas de recolección y almacenamiento de datos electrónicos.
Con respecto a esta última tarea, el panel propuso que su resguardo pase a manos de entidades privadas como empresas telefónicas o proveedores de servicio de internet.
También propuso que el titular de la NSA sea un civil y no un militar, además de cambios a la ley que permite al gobierno llevar a cabo este tipo de monitoreo, sin que ello signifique el fin de este controversial programa.
Las 46 recomendaciones del reporte apuntan a establecer un sistema que resulte en una mayor rendición de cuentas del gobierno sobre estas actividades, no sólo ante el Congreso, pero también ante sectores de la sociedad civil y aún actores extranjeros.
Cass Sunstein, uno de los expertos nombrados por Obama para integrar este grupo, dijo a senadores que sus consideraciones estuvieron orientadas también a lograr que las agencias de inteligencia mantengan sus capacidades para llevar a cabo sus tareas.
Al comparecer este martes ante el Comité Judicial del Senado, Sustein precisó que ninguna de las 46 recomendaciones presentadas en su reporte pondrá en riesgo esa capacidad en absoluto.
En términos de las reformas, Sustein dijo que en la elaboración del informe el grupo tomó en cuenta tres importantes consideraciones:
La primera apuntó a mantener la red internet como un espacio libre; rendición de cuentas por parte de los actores involucrados en estas tareas; y establecer un sistema de valoración de riesgos a la hora de llevar este tipo de tareas.