El hombre que el pasado miércoles realizó un ataque a una Guardería en China, utilizando una bomba casera y que dejó un saldo de ocho personas muertas y 65 heridas, sufría de algunos problemas mentales, así lo han informado las autoridades de ese país.
El autor del ataque fue identificado simplemente como Xu, con 22 años de edad, el cual había alquilado un departamento en las cercanías del lugar de ataque solo uno días antes de realizarse el mismo, algunas de las investigaciones han apuntado que fue en ese lugar en donde fabricó el aparato explosivo.
Durante el registro realizado por parte de las autoridades en el domicilio del atacante pudieron encontrar diversos mensajes en manuscritos que se encontraban en las paredes como: “Había palabras como matar, destruir, acabar“, así lo indicaron algunos medios locales.
La explosión se dio cerca de las 17:00 horas locales, justo en la entrada del jardín de niños, justa la hora en la cual algunos de los padres empezaban a recoger a los infantes, mientras que otros solo aguardaban ser recogidos para ir a casa.
Entre los afectados hay por igual niños como adultos que recibieron algún impacto del artefacto explosivo de fabricación casera, al igual que de artefactos que salieron volando a causa de la explosión.
El viceministro de Seguridad Pública, Huang Ming, se ha desplazado hasta la zona del ataque para llevar a cabo de manera personal la investigación pertinente. El Gobierno del país asiático ha ordenado una investigación a fondo por parte de las autoridades para dar a conocer cada detalle del ataque, tanto sus motivos como las consecuencias finales del mismo.
La guardería atacada estaba ubicada en la localidad de Xuzhou, que está en la provincia de Jiangsu, al este de China. Normalmente esta zona es tomada como una de las más seguras de aquel país.