Islamabad, 18 Sep (Notimex).- Al menos 16 personas murieron y 13 rebeldes fueron abatidos durante un ataque de los talibanes contra una base de la fuerza aérea paquistaní, cerca a la ciudad de Peshawar, capital de la provincia nororiental de Khyber Pakhtunkhwa.
Los milicianos atacaron un campamento de la Fuerza Aérea de Pakistán (PAF) en el área de Badaber y mataron al menos a 16 personas que oraban dentro de una mezquita, según el canal de noticias Geo Tv.
“Los terroristas entraron en el campamento por dos puntos. Mientras un grupo fue contenido por las fuerzas paquistaníes, el otro se desplazó a la mezquita donde mataron a 16 personas”, reportó la dirección del Inter-Servicios de Relaciones Públicas (ISPR), que coordina la información militar con el público y los medios.
Un grupo de militantes atacó un puesto de control y trató de forzar su entrada a la base aérea de Badaber, señaló el mayor general Asim Bajwa en su cuenta oficial de witter.
“El TTP (Tehreek-e-Taliban Pakistan) asume la responsabiliad”, dijo en un comunicado el portavoz del grupo Muhamad Jorasani, quien añadio que una unidad suicida de los talibanes paquistaníes había llevado a cabo el ataque.
El primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, condenó enérgicamente el asalto y reiteró la resolución de la nación a continuar su misión de acabar con el terrorismo.
Bajwa señaló que una unidad especial de respuesta rápida del ejército contratacó a los milicianos cuando intentaban entrar a la instalación.
Al menos 25 personas, entre ellas dos oficiales y ocho soldados, han resultado heridos hasta el momento incluyendo a un oficial de la Fuerza de Reacción Rápida que respondió al ataque taliban.
El Jefe de Estado Mayor del Ejército paquistaní, Raheel Sharif, llegó a Peshawar para inspeccionar el funcionamiento de las instalaciones, tras la fallida embestida de militantes armados.
La base aérea, situada en las afueras de Peshawar no era funcional, y era utilizada como un lugar residencial para los empleados y funcionarios de la Fuerza Aérea.
Peshawar sufrió el peor atentado terrorista de la historia del país en diciembre de 2014 cuando milicianos del TTP masacraron a más de 150 personas, entre ellas 135 menores de edad, en una escuela militar de la ciudad.