Con voz rasposa, Robert Lewis Dear apareció en un enlace de video desde la cárcel del condado de El Paso, donde ha estado retenido desde que se rindió el viernes luego de un asedio de cinco horas.
El sospechoso de barba blanca vestía un chaleco acojinado que, de acuerdo a las autoridades, es la “bata de seguridad” estándar. Mantuvo la vista baja durante la mayor parte de la audiencia, mientras los familiares de las víctimas lo observaban desde el juzgado.
Cuestionado por el juez de distrito Gilbert Martinez sobre si entendía sus derechos, Dear respondió: “no hay preguntas”.
El defensor público, Daniel King, quien representó al atacante del cine en Colorado, James Holmes, se mantuvo al lado de Dear y será su abogado. Se prevé que le presenten cargos formales al sospechoso el próximo 9 de diciembre.
Dear, de 57 años, está acusado de matar a un policía universitario que respondió al ataque, así como a un veterano de guerra de Irak y a una madre de dos hijos al interior de la clínica. Otras nueve personas resultaron heridas.
Tras la audiencia del lunes, el fiscal de distrito, Dan May, dijo que Dear podría enfrentar otros cargos, pero no reveló más detalles.
La tarde del lunes, el esposo de Jennifer Markovsky, la mujer que falleció en el ataque, emitió un comunicado en el que recordó cómo les leía a sus dos hijos por la noche y los ayudaba con su tarea. “La extrañaremos, su comida, sus manualidades, y su espíritu aventurero”, escribió Paul Markovsky.
La policía se ha negado a conjeturar sobre un motivo del ataque. Un agente de la ley dijo que Dear comentó a las autoridades “no más partes de bebés” durante una balbuceante declaración poco después de su arresto. El agente habló bajo solicitud de anonimato debido a que no estaba autorizado a hablar de una investigación abierta.