En 2015 se había instaurado una ley en Arizona en la cual los jóvenes indocumentados protegidos por el Programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA) eran candidatos para recibir becas para poder pagar bajas colegiaturas, al igual que cualquier ciudadano estadounidenses, que viva en dicho estado.
Sin embargo la Corte de Apelaciones de Arizona ha determinada eliminar esa ley, por lo que a partir del próximo mes de julio, los estudiantes pertenecientes al programa antes mencionado o pagan completa sus colegiaturas o ya no tendrán la oportunidad de estudiar con una beca académica.
Resulta que la corte del estado de Arizona determinó que la decisión que habían tomado hace dos años era “incorrecta” y que los estudiantes indocumentados conocidos como “dreamers”, no deberían quitarle las oportunidad a norteamericanos y tener los mismos beneficios, pues al fin y al cabo son ilegales.
El juez Kenton Jones ha justificado esta decisión, ya que las leyes de migración permiten a cada estado decidir sobre los beneficios que reciben los inmigrantes en su territorio, ya que estas leyes son opcionales, por lo que han decidido retirar los apoyos a los inmigrantes.
En 2015 se había determinado anular la ley Proposición 300, la cual había sido instaurada en 2006, la cual prohíbe los beneficios públicos para cualquier persona que viva en Arizona sin estatus migratorio legal.
“En consecuencia, concluimos que los beneficiarios de la DACA no son automáticamente elegibles para los beneficios de colegiaturas de residentes en el estado“, dijo el juez Jones.
Estados como Oklahoma, Texas, Tennessee y Nebraska han determinado otorgar becas académicas a los inmigrantes indocumentados, pues consideran que son parte esencial del desarrollo del país, sin embargo Arizona ha querido ir hacia el lado contrario.
Grupos activistas han reaccionado de manera inmediata ante esta determinación y aseguraron que van a buscar tomar acciones legales para intentar revocar el fallo.