La dependencia entre Argentina y Brasil ha ido aumentado a lo largo del tiempo, sobre todo cuando se refiere al sentido comercial, enfocado al negocio de la industria automotríz.
La crisis que actualmente vive Brasil hace temer a las consecuencias que puedan llegar para su vecino del sur, aunque no solo se habla de economía, pues es factor político puede estar vinculado, siendo este un año de elecciones.
Cuando Brasil ha reportado una estabilidad financiera, esto significa para Argentina el 30% de las exportaciones.
Mauricio Macri, presidente de la República Argentina ha sido estrecho aliado del gobierno de Michel Temer, el mandatario brasileño. Muestra clara de esto fue la visita y felicitación de Macri a la llegada de Temer al poder del gobierno brasileño tras la salida de Dilma Rousseff.
“Brasil es nuestro principal socio. Esto nos preocupa. Pero confiamos en que las instituciones brasileñas sepan resolver esta situación”, señaló Norberto Frigerio, ministro del Interior.
El Gobierno argentino se vería beneficiado en caso de que Temer continúe al mando del gobierno brasileño, esto gracias a la estrecha relación que se ha establecido. La gran preocupación para Argentina es que esta crisi se pueda alargar, algo que ya sucedió anteriormente con la destitución de Rousseff.
En Argentina ya se han estado preparando para cualquier clase de escenario, tanto que el Gobierno como la oposición han vivido estos días como una batalla clave que afecta a la política interna del país sudamericano.
La principal preocupación sigue siendo la economía, pues al llegar las primeras noticias del país vecino, tanto la bolsa, como las monedas locales iniciaron con una decadencia notable, dicha tendencia se mantiene aunque aún no ha llegado a el hundimiento total.
El peso argentino se encuentra en un precio elevado, teniendo impacto directo en la capital Buenos Aires, que es la ciudad más cara de Latinoamérica.
No solo lo que pase en Brasil afecta a la Argentina, también los hechos que se han dado durante el mandato de Donald Trump al frente del gobierno de los Estados Unidos han mermado a la economía del país comandado por Mauricio Macri.