Buenos Aires, 15 Oct (Notimex).- El gobierno argentino puso en marcha desde hace nueve años el Programa de Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres para enfrentar el impacto de inundaciones, tempestades, sequías y epidemias, revelaron documentos oficiales.
El Programa es ejecutado por la Subsecretaría de Planificación Territorial, organismo que diseña estrategias de reducción de riesgos y que en los últimos años ha intensificado el análisis de crisis que puede provocar el cambio climático.
La dependencia participó en la elaboración del Documento País 2012. Riesgo de desastres en la Argentina, un reporte exhaustivo que es el más reciente en su tipo y que fue impulsado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y la Cruz Roja.
El informe destaca que Argentina es parte de los países que ya adoptaron el concepto de desastre socionatural, en reemplazo de la visión parcial, superada y paralizante de desastre natural.
Además, en 2007 puso en marcha la Plataforma Nacional Argentina para la Reducción de Desastres que es coordinada por la Comisión Cascos Blancos y la Dirección Nacional de Protección Civil.
También participan organismos públicos nacionales, provinciales y municipales, sectores académicos, organizaciones no gubernamentales, instancias privadas como compañías de seguros y bancos, así como medios de comunicación.
Aunque destaca los avances de Argentina en la materia, el documento advierte que hay un creciente consenso acerca de la importancia de la gestión integral de riesgo y de la necesidad de establecer un nuevo tipo de organización, con un fuerte liderazgo político con un alto poder de convocatoria.
A lo largo de sus 250 páginas, afirma que se necesita repensar el lugar jerárquico que debe ocupar dicha organización dentro de la Administración Pública Nacional, como así también redefinir sus funciones, asumiendo responsabilidades de coordinación más integrales en la reducción de riesgo.
En un análisis global, explica que de 1970 a 2007, en Argentina hubo 10 mil 750 desastres como inundaciones, tempestades, incendios forestales, sequías, granizadas, aluviones, deslizamientos y epidemias.
El saldo que dejaron estos desastres fue de un millón 974 mil 867 evacuados, mil 983 muertos, 36 mil 559 viviendas destruidas, y 83.3 millones de hectáreas de cultivos y bosques dañadas.
Uno de los desastres de mayor impacto fueron las inundaciones de la provincia de Santa Fe, que en 2003 mataron a 158 personas, aunque la provincia de Buenos Aires, además de los muertos, acumula miles de damnificados cada año también por lluvias.
Además de las tareas de evacuación previa de zonas que pueden ser afectadas, el gobierno suele poner en marcha programas de apoyo como cancelación de pagos de impuestos para los damnificados, ayuda para la reconstrucción de sus casas o campo e incremento de programas sociales.