Cristina Fernández de Kirchner, presidenta de Argentina, criticó la política migratoria de Europa por la forma en que los países europeos han enfrentado la crisis humanitaria ante el alud de refugiados sirios y africanos.
“Por favor, que nadie nos venga a poner de ejemplo a algunos países del norte, advirtió la mandataria durante un acto en el que estuvo acompañada por el ex presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva.
Agregó que yo no quiero parecerme a países que dejan morir chicos en las plazas, eso no es de cristianos, es decadencia cultural, se andan tirando a los inmigrantes de un país a otro como si fueran bultos, nosotros, un país de inmigrantes y que recibió a nuestros abuelos, somos un ejemplo”.
Aunque no la citó por su nombre, Cristina Fernández señaló que no quiere parecerse a la canciller de Alemania, Angela Merkel ni a nadie que le dice que se tiene que ir a una piba de 15 años que se quiere quedar a estudiar.
Cristina Fernández insistió en que no quiere parecerse a los que dejan que se muera gente en las bodegas de los barcos ni a los que crean un muro a lo largo de su frontera para que no pasen los de al lado, que son los que sostienen el trabajo y la producción del país.