La ordenanza fue aprobada por cuatro votos a favor y uno en contra y establece sanciones para acosadores escolares que se elevan en caso de reincidencia.
La medida convertirá al acoso en delito menor para aquellos que lo practiquen desde preescolar hasta los 25 años de edad y podría incluir a los padres del agresor.
Los agresores serán tipificados por causar terror, atemorizar, intimidar, amenazar, acosar o molestar sin llegar necesariamente a causar un daño físico, establece la medida.
El Código Penal de California sólo castiga al acoso cuando éste representa una amenaza a la vida o a la seguridad de su víctima.
La medida también incluye la modalidad del ciber bullying para aquellos que practiquen esas agresiones por vía computarizada u otros medios tecnológicos modernos.
La policía y otras corporaciones estarán facultadas para la presentación de cargos contra los presuntos agresores.
El alcalde de la ciudad y maestro escolar, Jim Dear, dijo que la medida podría no sólo proteger a potenciales víctimas sino enviar un severo mensaje a los agresores.
De igual forma se busca eliminar casos dramáticos de jóvenes que sufren depresión e incurren en suicidio como consecuencia de las agresiones.
La ordenanza establece que una primera agresión tendrá una multa de cien dólares, el doble en el caso de una segunda y hasta de 500 dólares para sancionar una tercera, que abriría además la posibilidad de presentarla como delito menor ante la autoridad.
Reportes federales han señalado que alrededor del 28 por ciento de los estudiantes de sexto a doceavo grado sufren de acoso.
Un estudio reciente demostró que 60 por ciento de practicantes de ese acoso y agresión fueron convictos por un delito cuando alcanzaron la edad adulta.
La medida aprobada este miércoles aún deberá ser ratificada en la ciudad de Carson, unos 40 kilómetros al sur del centro de Los Angeles, para cobrar vigencia las próximas semanas.