El célebre dicho también aplica para la humanidad: “Madre sólo hay una”, y por eso hoy celebramos el Día Internacional de la Madre Tierra para recordar que el planeta y sus ecosistemas nos dan la vida y el sustento.
Se trata de admitir una responsabilidad colectiva, de fomentar la harmonía con la naturaleza y la Madre Tierra para alcanzar el equilibrio justo entre las necesidades económicas, sociales y medioambientales de las generaciones presentes y futuras.
Este año se llevará a cabo la campaña “Alfabetización medioambiental y climática”, cuya celebración pretende fomentar la armonía con la naturaleza y la Madre Tierra para alcanzar el equilibrio justo entre las necesidades económicas, sociales y medioambientales de las generaciones presentes y futuras.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) señaló que la educación constituye los cimientos del progreso. “Necesitamos que la ciudadanía mundial conozca los conceptos sobre el cambio climático y sea consciente de la amenaza sin precedentes para el planeta”.
“El conocimiento nos empoderará a todos y nos llevará a tomar medidas para defender el medio ambiente”, menciona.
El Día de la Tierra fue promovido por el senador estadounidense Gaylord Nelson, quien estableció este día para crear una conciencia común a los problemas de la superpoblación, la producción de contaminación, la conservación de la biodiversidad y otras preocupaciones ambientales para proteger la Tierra.
La primera manifestación tuvo lugar precisamente el 22 de abril de 1970. En la convocatoria participaron dos mil universidades, diez mil escuelas (primarias y secundarias) y centenares de comunidades.
La presión social tuvo sus logros y el gobierno de los Estados Unidos creó la Environmental Protection Agency (Agencia de Protección Ambiental) y una serie de leyes destinadas a la protección del medio ambiente.
En 1972 se celebró la primera conferencia internacional sobre el medio ambiente. La Cumbre de la Tierra de Estocolmo, cuyo objetivo fue sensibilizar a los líderes mundiales sobre la magnitud de los problemas ambientales.
Es un día para rendir homenaje a nuestro planeta y reconocer a la Tierra como nuestro hogar y nuestra madre, así como lo han expresado distintas culturas a lo largo de la historia, demostrando la interdependencia entre sus ecosistemas y los seres vivos que la habitamos.