Debido a que suele ser más seco el ambiente, durante la temporada de invierno, las infecciones en los ojos tienden a aumentar, riesgo que es aún mayor si además la gente tiende a lavarse las manos con menos frecuencia, dijo el especialista Adrián Beltrán Martínez.
El experto en Oftalmología del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco indicó que la situación es aún más compleja en pacientes que de por sí tienen afecciones oftalmológicas preexistentes como síndrome del ojo seco o bien aquellos propensos a conjuntivitis alérgicas.
Destacó que el clima frío y seco tiende a hacer que en el ambiente se suspendan partículas que, al ingresar a los ojos, facilitan el desarrollo de procesos infecciosos que entre los síntomas más evidentes inflaman la conjuntiva (conjuntivitis) provocando enrojecimiento, sensación de cuerpo extraño, lagrimeo e incremento de lagaña.
El resultado de este proceso son recaídas en pacientes con síndrome de ojo seco o conjuntivitis alérgica y el incremento en casos de conjuntivitis infecciosa, siendo niños y adultos mayores los más afectados.
Si bien no son enfermedades graves, sí son comunes y fáciles de evitar, por lo que Beltrán Martínez recomendó no descuidar los hábitos higiénicos en invierno, tales como lavarse las manos de manera constante, utilizar pañuelos desechables.
Además, dijo, frente a un estornudo cubrirse la boca con la parte interna del codo, mantener adecuada ventilación en el hogar y no tallarse los ojos con las manos, menos aún si están sucias.