La prenda más versátil puede tener un lado oscuro, en tramos a detalle sobre los problemas de leggings que cualquier chica entiende.
Los leggings parecen ser un sinónimo de comodidad y una prenda que ayuda a armar atuendos rápidos y sencillos. No nos extraña que la mayoría de chicas posea más de algún par en su clóset, ok, mucho más que un par de ellos. Sin embargo no todo es tan fácil y en nuestra vida cotidiana podemos toparnos con algunos de los siguientes problemas.
- Cuando tienen esos estampados futurísticos, psicodélicos o muy llamativos y no tienes la menor idea si puedes usar algo así.
- Cuando se vuelven transparentes pero tú juras que no eran así.
- Tienes que cuidarte constantemente del “camel toe“.
- Buscas entre la infinidad de pares que tienes el mejor de todos (que puede ser igual a los otros 20 pares).
- Notar manchas de sudor abajo de tu derrière y darte cuenta que seguro otros también lo hicieron.
- No entiendes cómo un par puede costar $100 cuando luce igual a uno de $20.
- Si no son de cintura alta tendrás que enfrentarte al “muffin top” sin duda alguna.
- Cuando la celulitis se puede apreciar perfectamente a tras de ellos.
- Cuando tu leggings negros se vuelven café o gris.
- Cuando se les abre un hoyo entre la entrepierna y los pierdes para siempre.
- Cuando se estiran demasiado rápido y parecen pijamas.
¿Te sientes identificada? Cuéntanos acerca de tus experiencias, seguro tienes una anécdota similar.