El cuerpo está compuesto de grasa, músculos, órganos, huesos y agua, y a medida que se va llegando a los 30, somos más propensos a perder el tejido magro que se concentra, principalmente, en los músculos. El máximo de masa muscular ocurre entre los 20 y 25 años, después de ésta edad se inicia un descenso que, década tras década, es mayor. Este proceso de perdida muscular es conocido como atrofia y se puede padecer cuando no se está llevando una alimentación correcta y el ejercicio adecuado. Otra causa que provoca la pérdida de masa muscular son los largos períodos de sedentarismo.
La mujer debe ingerir, en promedio, 50 gr de proteína diaria, ya sea vegetal o animal; esto es importante para el mantenimiento de los músculos. Es fundamental mantener en buen estado los músculos porque son los que nos ayudan a movernos, controlan la postura y posición del cuerpo, además estabilizan las articulaciones con respecto a la gravedad.
Para contrarrestar la pérdida de masa muscular se pueden hacer diferentes cosas:
- Hacer ejercicio mínimo tres veces a la semana. Se deben evitar los ejercicios de cardio tan frecuentes, estos provocan la pérdida del tono y masa muscular. Se aconseja realizar ejercicios que requieran fuerza, como pesas y ejercicio funcional.
- Comer bien. Las proteínas y los aminoácidos son fundamentales en la dieta diaria. Frutas, verduras, granos enteros, carne, pescado, huevos y lácteos. También es bueno consumir antioxidantes como vitamina D y Omega 3, para reforzar y mantener la masa muscular.
- Reducir el consumo de alcohol y de cigarrillo. Estos evitan que los músculos absorban con mayor facilidad los nutrientes proporcionados por los alimentos.
- Descansar mínimo seis horas diarias. El cuerpo usa el sueño y el descanso para reparar y crear tejidos en el cuerpo.
Dicen que la edad está en la mente, es cuestión de tener actitud para llevar de la mejor manera los achaques de cada etapa de la vida. Siempre se puede hacer algo para mejorar la calidad de vida.