Debajo de los pulmones tenemos un músculo llamado diafragma, el cual, tiene la función de mover a estos órganos hacia arriba y hacia abajo; desciende cuando inhalas para ayudarte a llevar aire a estos, y sube cuando exhalas para poder expulsarlo.
Cuando el diafragma se irrita, éste sube de manera brusca y hace que la respiración sea con espasmos, descontrolada y repetitiva, por lo que, al llegar a la laringe, la glotis se cierra bruscamente y se produce el típico sonido “hip”.
Algunas de las cosas que irritan el diafragma son: comer demasiado o muy rápido, una inflamación de la garganta o el estómago y el consumo de alcohol o bebidas carbonatadas en exceso.
También existen cuestiones psicológicas que pueden provocar hipo como: nerviosismo o ansiedad, debido a que estos estados irritan al nervio frénico, impidiendo que realice su función adecuadamente (estimular al diafragma para contraerse).