Los niños muchas veces a partir de los 4 años se creen “niños grandes” comienzan a renegar sobre la manera de vestir, lo que quieren calzar e incluso comer. También comienzan a sentir que al ser ya mayores ameritan usar un asiento que no sea de “bebé” cuando van el auto.
Las sillas de seguridad están creados para que de acuerdo al peso y talla de los niños disminuyan el riesgo de sufrir alguna lesión ante un pequeño golpe, frenado brusco o accidente mucho más graves en el vehículo.
Los hijos menores de 12 años son los pasajeros más vulnerables en un automóvil, por esa razón los niños desde bebés y hasta los 12 años de edad deben usar sillas especiales para mantenerlos seguros en un vehículo.
Si vas a comprar un asiento de seguridad para el auto debes tomar en cuenta que cada uno está adaptado de acuerdo a la edad, peso y talla y se debe acomodar al infante en el asiento trasero del carro.
Los bebés de cero hasta los 18 meses o hasta que pesen aproximadamente 13 kilogramos deben colocarse en un portabebé. Se coloca en sentido contrario a la marcha del auto así se logra reducir el de lesiones cervicales en impactos frontales y aumenta la protección en los golpes laterales.
A partir de los 2 años y hasta los 4 años pesos entre 13 y 18 kilogramos los niños deben viajar en sillas de seguridad y pueden ir mirando hacia el frente.
De entre los 4 y 6 años con un peso de 25 kilogramos se les debe ajustar el cinturón de seguridad del coche pasándolo a través de la silla de seguridad.
Los asientos elevados se pueden usar a partir de los 6 años y hasta los 12, con un peso máximo de 36 kilogramos, para lograr un ajuste del cinturón sobre la clavícula.
No olvides que antes de salir de viaje hay que cerciorarse de que el sistema de anclaje de la silla o asiento esté correctamente instalado y los arneses de seguridad ajustados, para que absorban el movimiento hacia adelante, en caso de un percance.
Recuerda que los niños deben ir siempre en el asiento trasero de un automóvil, los coches modernos están diseñados de la misma forma con bolsas de aire en los asientos delanteros, éstas pueden ser peligrosas en caso de un accidente. ¡Los niños siempre van atrás!
En algunos países como Estados Unidos siguen estas reglas, es tiempo de que en México tomemos este tipo de medidas.