La coordinadora de Prevención y Atención a la Salud del IMSS en Jalisco, María Guadalupe Gutiérrez Guerrero, señaló que la hipertensión arterial es un fuerte motivo de consulta, en especial en el grupo de mujeres de 20 a 59 años.
En entrevista, la experta en Salud Pública destacó que el 17 por ciento de los casos de hipertensión se ubican en dicho grupo etario y género y explicó que se trata de una elevación crónica de la presión sanguínea.
Explicó que se trata de una enfermedad del sistema cardiovascular, cuyo origen puede ser hereditario, aunque estilos de vida sedentarios, con mala alimentación y exceso de estrés, pueden desencadenarla.
La acumulación de placas de grasa (ateromas) en las paredes internas de vasos sanguíneos, hacen que éstos se achiquen en su diámetro, y en consecuencia, la circulación se afecta, incrementando el riesgo a sufrir infartos, ya sea cerebrales o cardiacos.
Entre los síntomas más frecuentes se encuentran: dolor de cabeza constante, zumbido de oídos, mareos, angustia, palpitaciones y sudoración.
Para llegar a un diagnóstico se requiere que por lo menos en dos ocasiones distintas, se obtengan valores por arriba de los límites normales de la presión que, en lo que respecta a la sistólica tiene un tope máximo de 120 milímetros de mercurio, mientras que la diastólica no debe rebasar los 80 milímetros.
Subrayó que una presión arterial alta, no atendida, ocasiona daños irreversibles graves a nivel renal, ocular, así como cardiaco y cerebral (derrames).