Modelos de moda excesivamente delgadas se quedan sin trabajo en Francia
Además un médico tendrá que expedir certificado para avalar que están saludables
Los modelos de moda en Francia tendrán que proporcionar los certificados médicos que demuestren que están sanas para trabajar, después de que una nueva ley fue introducida prohibiendo modelos excesivamente delgadas.
Una medida adicional, que entrará en vigor el 1 de octubre, exigirá que las revistas, anuncios y sitios web marquen imágenes en las que la apariencia de un modelo ha sido manipulada con las palabras “photographie retouchée” (fotografía retocada).
Se insta a los médicos a prestar especial atención a las modelos en el índice de masa corporal (IMC), teniendo en cuenta la edad, la altura y el peso. Sin embargo, a diferencia de la legislación similar aprobada en Italia y España, las modelos no tendrán que alcanzar un IMC mínimo.
Según la Organización Mundial de la Salud, un adulto con un IMC inferior a 18,5 se considera insuficiente, 18 desnutridos y 17 desnutridos severos. La modelo promedio que mide 1.75m (5ft 9in) y pesa 50kg (7st 12lb) tiene un IMC de 16.
El ministro de Salud de Francia dijo que estas medidas estaban dirigidas a prevenir la anorexia, al detener la promoción de ideales inaccesibles de belleza.
“Exponer a los jóvenes a imágenes normativas e irrealistas de los cuerpos conduce a una sensación de autodesvaloración y baja autoestima que puede afectar el comportamiento relacionado con la salud”, dijo Marisol Touraine, ministra de Salud y Asuntos Sociales.
Dado el papel de liderazgo de París en la industria de la moda, las medidas – aprobadas en 2015, pero que sólo están entrando en vigor – probablemente tendrán un impacto simbólico en todo el mundo.
Las propuestas habían sugerido originalmente un IMC mínimo para los modelos, pero, después de reclamos airados de los ejecutivos de la moda y las agencias de modelos, esto fue descartado en favor de permitir a los médicos a decidir si una modelo es demasiado delgada.
Las agencias que usen modelos sin certificados médicos válidos podrían enfrentar una multa de 75.000 euros y el personal involucrado de hasta seis meses de prisión.
Si las revistas no incluyen la leyenda de “fotografías retocadas”, se aplicará una multa de 37,500 €, o hasta el 30% de la cantidad gastada en el anuncio o inserción.