¿Qué tiene más cafeína, la manzana o el café?
Esto en realidad es un mito
Seguramente alguna vez has escuchado que la manzana tiene los mismos efectos del café o que consumir manzanas te mantendrá más despierto.
Se trata de dos cosas totalmente diferentes y compararlas no tendría sentido.
El café mediante la “cafeína” te mantiene despierto ya que estimula el sistema nervioso y mejora el rendimiento en esfuerzos prolongados provocando la quema de grasas como combustible en lugar de carbohidratos.
El café genera deshidratación y es recomendable ser ingerido siempre antes del esfuerzo físico o mental.
Por otro lado la manzana es uno de los alimentos con mayores beneficios científicamente probados para la salud. Contiene importantes nutrientes, vitaminas y valores energéticos que lo convierten en un combustible perfecto para nuestro día a día.
Pocos lo saben pero posee una capacidad curativa, funciona como antiinflamatorio, también es diurética y depurativa
Por último destacar un dato que nadie conoce, y es que la manzana posee un bajo índice glucémico, es decir, que ingerir manzanas no produce una subida brusca de glucosa, por eso el perfil de absorción es más lento y adecuado.
El hecho de comer una manzana hace que nuestro cuerpo utilice más músculos pero no contiene ninguna sustancia estimulante.
Como bien sabemos los líquidos se digieren mucho más rápido que los sólidos, una manzana tarda entre dos y tres horas en ser asimilada mientras que un café tarda entre 15 y 20 minutos.
Aunque el café es un estimulante natural su efecto dura poco menos mientras que la manzana te despierta porque activa tu metabolismo por la cantidad de fibra que contiene.
No existe ninguna sustancia que “despierte o revitalice más el organismo” lo que activa nuestro cuerpo es el descanso, los buenos hábitos alimenticios y el ejercicio constante.