Aunque pareciera lo contrario, los días lluviosos nos permiten disfrutar con la familia de diversas actividades para reforzar lazos de comunicación y divertirnos. Recuerda que los momentos que compartes con los más pequeños serán un bello recuerdo de adultos.
Los juegos de mesa como Pictionary, Clue, Twister o Monopoly son actividades divertidas para realizar dentro de casa. Los niños no sólo se divirtieran mientras juegan sino que también compartirán un momento fundamental con sus padres y pueden aprender a trabajar en equipo a saber ganar y perder. Si no tienes uno de estos puedes probar con el clásico juego de mímicas, gato o basta.
Los rompecabezas.
Armar un rompecabezas es todo un reto y no sólo es un pasatiempo para un día de lluvia, sino también un gran ejercicio para el cerebro de los niños. Ve primero por un diseño básico y aumenta la destreza poco a poco.
Encentra el tesoro.
Antes de jugar con los pequeños debes dejar pistas por toda la casa para que ellos las busquen y resuelvan el acertijo. El tesoro puede ser un caramelo o una galleta, el chiste es que descifren las pistas. Se divertirán mucho.
Fiesta de disfraces.
Estimula la imaginación de tus hijos creando disfraces con accesorios que tenemos en casa, no es necesario alquilarlos ni comprarlos.
Cine.
Prepara suficientes palomitas y voten democráticamente por un par de películas que todos puedan ver, después pueden comentar sobre lo que vieron.
Arte.
Toma hojas, lápices y colores para crear obras de arte que desarrollarán su creatividad y habilidades artísticas.
Saltar en los charcos.
Pueden tomar las botas de lluvias, impermeables y salir a saltar sobre los charcos. De vez en cuando debemos dejar salir a nuestro niño interior y disfrutar las cosas simples de la vida.
¡Así que a disfrutar de los días lluviosos!