En la guerra y en el amor todo se vale, al menos eso dice refrán. Si tu sexto sentido te hace pensar en que hay una tercera persona en tu relación sentimental, es hora de averiguar si tu pareja te está siendo infiel.
Todo parte del cambio repentino de él hacia ti. Si comienzas a notar una inusual preocupación por su aspecto físico como retomar el ejercicio, ser más cuidadoso a la hora de elegir su ropa, cosas que en el tiempo que ya llevan juntos no se ha habían presentado.
Cambios en sus hábitos de sueño o su horario diario pueden indicar alteraciones por otras actividades que no hacía, que repentinamente tenga mucho trabajo en la “oficina” o se quede horas de más en el “gym”
¿Lo notas más distraído o distante? Si de unos días para acá está desinteresado por lo que pasó en tu día o aburrido cuando tiene conversaciones largas contigo tal vez su interés y compromiso están enfocados en otra persona, no en ti.
Identifica los cambios o variaciones en su vida sexual. La reducción de encuentros íntimos o por el contrario un aumento repentino y extraño en la actividad sexual con nuevas preferencias o gustos sexuales que no experimentaste con él anteriormente te puede hacer preguntarte ¿dónde aprendió eso?
Agresividad en el ambiente: Analiza si se pone a la defensiva o se enoja contigo fácilmente y con más frecuencia. Los cambios en su comportamiento habitual que implicarían enojo hacia ti podrían ser un reflejo de culpa por serte infiel o del miedo de que lo descubras.
¡Confróntalo! Debes hablar con el de tus sospechas y tus argumentos porque también es posible que él esté enfrentando otro tipo de problemas que no tiene nada que ver con faldas. Privilegia el diálogo antes de recurrir a medidas drásticas, como husmear o invadir su privacidad.